Regreso a la “Nueva Normalidad”

“El futuro nos ha alcanzado de manera impositiva, con su peor rostro. El futuro nos ha alcanzado para desacelerarnos y detenernos

Por Ricardo Flores Pereyra.

En todo el mundo ya completamos más de 2 meses de confinamiento y aislamiento voluntario impuesto por los gobiernos, y el optimismo y hasta la “desesperación” nos lleva a preguntarnos cómo será el retorno a la normalidad. ¿Volveremos a vivir una vida normal?

Si usted pensaba que después de la pandemia del COVID-19 volveríamos poco a poco a la rutina de antes, está completamente equivocado. En algunos lugares la reaparición del virus y su intensa y rápida propagación ha cambiado bruscamente el panorama.

El pásado13 de mayo se informó el nuevo plan de reapertura en México después de 52 días de estar detenidas más del 87% de las actividades.

A esta estrategia le han denominado “NUEVA NORMALIDAD”, considero que este concepto puede confundir a la población, haciéndoles creer que la pandemia terminó cuando en realidad ahora es cuando nos encontramos en el punto más crítico.

Ahora, creo que esta “NUEVA NORMALIDAD” no es del todo mal, ya que es imposible mantener la economía detenida por tanto tiempo e implementando la estrategia propuesta de ir haciéndolo de manera escalonada puede ser una buena oportunidad para evitar un repunte masivo y al mismo tiempo se puede comenzar reactivando la economía.

En esta “nueva normalidad” debemos familiarizarnos que si de nuevo se registran brotes de contagio deberemos regresar, nos guste o no al confinamiento. Por eso estoy seguro que normalidad no será, no lo podrá ser con la pandemia todavía en curso.

Por eso no hablemos de una nueva normalidad cuando apenas vamos a vivir los estragos de una nueva realidad, ocasionada por un virus fantasma que no se ve pero que en algunos casos es letal.

En esa realidad, los gobiernos de todos los niveles “deberán” aprender a lidiar con casos masivos y a administrar la muerte. Nosotros como sociedad tocará aprender a arriesgarnos lo menos posible. Pero el ‘no arriesgarse’ está fuera de las opciones realistas, pues “debemos” salir a trabajar para llevarle el sustento a nuestra familia.

En esta nueva realidad debemos pagar costos. Económicos, todos. De salud, muchos, de pérdidas humanas, bastantes.

Y cuando nos adaptemos a esas nuevas prácticas, porque si, nos vamos a adaptar, dice Viktor Frankl en su obra EL HOMBRE EN BUSCA DE SENTIDO “el ser humano es el único que puede adaptarse a cualquier situación” talvez comencemos a entender esa “nueva normalidad” pero falta mucho. Falta perder todavía más dinero, perder mucho tiempo y sentir demasiado dolor.

Por último, es necesario continuar con las medidas de prevención ya aprendidas e incorporadas a nuestro día a día, como seguir utilizando cubre bocas y/o caretas al salir de casa, medidas de sana distancia, proteger grupos vulnerables, respetar las restricciones impuestas en lugares públicos.

Así como es el mantener la mitad de la ocupación de cada lugar, lavado continuo de manos con agua y jabón y/o en su defecto utilizar constantemente gel antibacterial y en caso de iniciar con síntomas no salir de casa, no auto medicarse, recibir orientación médica pertinente.

Venceremos el virus, estoy seguro, el aislamiento terminará. Pero por favor olvídense de que de ella saldremos siendo mejores personas. Si acaso saldremos mas tristes, más locos y en algunos casos, más gordos.

Cuídese y cuide a su comunidad, si nuestro Dios lo permite, nos leemos pronto.

*Ricardo Flores Pereyra es fresnillense, Doctorante en Educación y Jefe de la Unidad de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Municipio de Fresnillo, Zacatecas.

*Fotos del Muro de Facebok de Esther del Real.