Defender las instituciones y la democracia es deber de todos

Opinión de Gabriela García

Dirigente de Antorcha en Panuco, Zacatecas

Es el Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) quien encabeza el linchamiento mediático contra el Instituto Nacional Electoral (INE), así manifiesta el temor de que su partido pierda el poder político que mantiene y para evitarlo vierte amenazas contra el organismo autónomo encargado de garantizar elecciones limpias el próximo 6 de junio.

Esta acción es muy grave para la vida pública del país, pero es parte de la estrategia de la 4t de hacer a un lado o destruir las instituciones que de alguna forma ponen un límite a los abusos que comete con el poder público. Después del presidente y ya envalentonados, siguen a este propósito el dirigente del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Mario Delgado y el polémico exalcalde de Acapulco, Félix Salgado Macedonio que se han dedicado a la persecución sistemática del INE por contravenir a sus intereses de partido y particulares, tal es el caso del último quien personalizó y exhibió a Lorenzo Córdova alentado a sus seguidores a buscarlo en su casa exponiendo al funcionario a algún ataque dirigido a su persona, casa y familia.

            Y se sabe que lo que motiva a esta cruzada anti INE es porque temen perder la mayoría en el Congreso de la Unión porque otras fuerzas políticas están presentes y pueden arrebatarle el control absoluto y la sobre representación con la que hacen y deshacen al antojo del presidente pasando por alto las leyes vigentes. Un ejemplo es el que pasó con el destino del presupuesto público de donde se eliminaron las partidas para obra pública dejando sin recursos y fondos que antes llegaban a municipios con los que se podían atender necesidades de llevar agua potable, drenaje, para pavimentar calles o caminos en colonias y comunidades.

El presupuesto es dinero  de todos los mexicanos, pero AMLO, con el aval de diputados federales decidió enfocarlos a los programas sociales  que le reditúan votos buscando la forma de perpetuarse en el poder; en una de las conferencias mañaneras el Presidente declaró con tono autocomplaciente: “no es tan fácil quitarnos el presupuesto, nada más les recuerdo que el Ejecutivo tiene facultad de veto”. En esta frase AMLO corroboró que en su mente bulle la idea fija de encaminarse hacia una “dictadura presidencial” pase lo que pase.

Por eso la persecución contra el INE es una táctica bien estudiada pues ya les estorba a sus intereses, no fue así en 2018 cuando le garantizó su triunfo a la Presidencia de México, pero ya la realidad es otra y hay que desaparecerlo.

Así fue que López Obrador intensificó sus ataques luego de que el Consejo General del INE ratificara su decisión y dejara fuera de la carrera electoral del 6 de junio a Félix Salgado Macedonio quien está acusado de diversos delitos como violación y acoso sexual,  por lo que no se entiende bien cuál sea la razón e interés por  sostener su fallida candidatura que quedó suspendida por una irregularidad en la presentación de los gastos de precampaña.

En contraparte, es de reconocer que a pesar de que las amenazas subieron de tono, Lorenzo Córdova ha estado muy sereno y siempre ha recordado que se debe “respetar la ley» porque «representa el piso mínimo de funcionamiento de una democracia constitucional”.

Son varios los hechos con lo que ya no hay duda de que la operación contra el INE es planeada, tal y como lo es la que se está haciendo en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para alargar el mandato de Arturo Zaldívar; ambas cosas tienen objetivos claros y precisos para el 2024, año en que se elegirá un nuevo Presidente del país, así es que a Morena le urge controlarlos porque sabe que el 6 de junio pueden perder el respaldo del pueblo de México.

En Antorcha nos pronunciamos por la defensa popular a los organismo autónomos y su fortalecimiento, exigimos frenar cualquier intento por consumar el exterminio de una institución que es clave para la vida democrática del país, porque el INE es de los mexicanos,  no es propiedad de Morena ni del Gobierno en turno, ni de ningún individuo en particular, es patrimonio del pueblo, por tanto es el pueblo el que debe defenderlo contra cualquier intento de destruirlo o anular su independencia como lo pretende el gobierno federal.